Diariamente, millones de inocentes palabras son masacradas y mutiladas de forma inmisericorde. ¿Quiénes son los responsables de tan atroz palabricidio? Los jóvenes, que desde sus aparatos móviles y sus computadoras, se enfrascan en conversaciones que, abiertamente desdeñan la ortografía y la gramática en un ejercicio de total libertinaje.
ola kmo stas? dnd vs a ir a kmr?
A toda hora, mensajes crípticos como estos son intercambiados por las nuevas generaciones. Tan sólo el análisis y la experiencia le permiten a uno entender lo que dicen. Como puede verse, las vocales son las principales víctimas de esta forma de comunicación, pero cualquier consonante mal ubicada está expuesta a ser recortada de forma contundente.
Este fenómeno tiene fácil explicación. Quienquiera que haya escrito un mensaje en un teclado de celular sabe que es una operación compleja y agotadora. Las letras del abecedario están distribuidas de tres en tres en cada tecla: ABC en una tecla, DEF, en la siguiente, y así. Dependiendo de la letra que se desee marcar, es preciso presionar una, dos o hasta tres veces el mismo botón, proceso que debe realizarse a una velocidad específica, pues de lo contrario el proceso deberá repetirse desde el principio. Dadas las circunstancias, es comprensible que los jóvenes buscaran formas de simplificarse la vida, aun a costa de las leyes de la morfología. Lo terrible es que trasladaron esta forma de escritura a las salas de Chat, y de allí se desparramó por la Internet entera.
Pero esta forma de escritura de las juventudes ha encontrado fuerte resistencia entre las generaciones nacidas antes del año 1985, que han decidido insistir heroicamente en escribir a la antigua, aun a pesar de las dificultades que conlleva hacer tal cosa en un telefono celular. Con ellos no hay abreviatura que valga. Las palabras se escriben completas, sin importarles el tiempo que les tome. Para muchos es fuente de orgullo utilizar mayúsculas y minúsculas en sus mensajes. Los que pueden, usan signos de puntuación de apertura y de cierre. Los más osados, usan acentos.
Ir en contra de la corriente nunca es fácil, pero los defensores del lenguaje han encontrado apoyo en los fabricantes de celulares, que ahora han empezado a producir modelos con teclados completos, como los de una máquina de escribir (aunque diminutos, por supuesto). Esto ha permitido a algunos conservar sus habilidades mecanográficas, aunque se vean forzados a ejercerlas únicamente con los pulgares (el espacio de los celulares no da para más). Aunque falta mucho para ganar la lucha por el idioma escrito, al menos esta batalla, es suya.
¡Ánimo, mis valientes!
1 comentario:
Ala pero por que tienen que escribir asi de mal? Yo no entiendo a las juventudes!! (Oiganme, pero ni que fuera una vieja de setenta años)
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